EL PROYECTO HUERTO NO ENTIENDE DE CONFINAMIENTO --> AGRICULTURA ECOLÓGICA

Aunque debido al COVID-19 llevamos confinados mucho tiempo, el proyecto huerto ha continuado. Esta entrada va dirigida a toda la Comunidad Educativa "Ciudad Jardín", donde os voy a hablar de la importancia de la agricultura ecológica, sin necesitad de utilizar químicos en nuestra tierra. Pues en la agricultura ecológica (AE) se le da de comer al suelo, y no a la planta, buscamos una tierra rica en vida, microorganismos, y pequeños animales que hacen su función procesando la materia orgánica (el alimento que damos al suelo) hasta convertirla en minerales (el alimento que el suelo ofrece a la planta).

1. En AE para tener un suelo vivo intentamos labrar lo menos posible (para no romper la estructura del suelo: las bacterias de la superficie no son las mismas que las de más profundo) y aportar mucha materia orgánica, es decir, no solo extraemos del suelo, también lo regeneramos y vamos creando un suelo cada vez más profundo en su horizonte orgánico (el superior y más fértil).

En la siguiente fotografía puede observarse el proceso de construcción de un bancal: una cama de cultivo donde  primero hemos profundizado labrando y luego hemos elevado con la propia tierra del lugar y aquella sacada de lo que serán los caminos, posteriormente serán cubiertos con un acolchado (mulching) elemento muy importante para impedir la compactación de la tierra, retener humedad, proteger a los microorganismos de los rayos UV y aportar materia orgánica. Los bancales son estructuras permanentes donde nunca pisaremos y apenas volveremos a labrar, solo se realizarán tareas de desherbado y aportes de materia orgánica.

Un buen complemento para un huerto ecológico es una espiral de aromáticas, una estructura donde podremos concentrar gran número de plantas auxiliares como aromáticas y flores que atraerán insectos beneficiosos y repelerán insectos plagas, además de ser un agradable componente estético. En las siguientes fotos observamos la espiral en construcción y su resultado al comienzo de la siembra.

 2. Control de plagas: En AE no utilizamos químicos de síntesis para abonar ni para luchar contra las plagas, en lugar de eso nos asociamos con la naturaleza utilizando sus recursos como en la espiral de aromáticas pero también usamos nuestro ingenio. En la siguiente fotografía podemos ver varias tejas en el suelo. Cuando hay una plaga de Caracoles y babosas como comentaba mi compañera Mª Yolanda en otra entrada, en lugar de utilizar productos químicos, intentaremos que nuestros amigos no se coman la cosecha con otros remedios: trampas de cerveza, que les encanta, tejas donde se resguardan, ... si cada día las volteamos, los encontraremos ahí.

En AE contamos con unos bichitos que nos visitan y mantienen controladas las poblaciones de insectos plaga, ellos son la Fauna Auxiliar pero ¿cómo los invitamos a que nos visiten? con señales luminosas, las flores!! (a las que dedicaremos una entrada)

Otras plantas nos ayudan a decirle a los insectos plagas que no son bienvenidos como la albahaca o la citronela que ahuyentan a los mosquitos...podemos ponerlas en tiestos en las ventanas, entrada de la casa o balcones.

3. Reciclaje : En las siguientes fotografías podemos ver soluciones creativas con materiales reciclados como los invernaderos individuales realizado con botellas con el fondo cortado creando un efecto invernadero para las plantas mas sensibles a las heladas y para retener humedad en episodios de fuerte viento.

También podemos usar palitos tallados para etiquetar nuestras variedades en los bancales o en el semillero.

4. Herramientas: se usan muchas herramientas o aperos en agricultura, en el caso de la agricultura ecológica, siempre que no sea necesaria usar maquinaria usaremos herramientas de mano como azadas/legonas/zachos, rastrillos, rodo, horcas o estos plantadores que utilizamos para los transplantes, con diferentes medidas según el tamaño de cada plantón (si los compramos por ejemplo en un vivero o los obtenemos de nuestro semillero). En cuanto a la siembra directa de semillas,  mejor es utilizar el dedo y prescindir de ellos.

5. Compostera: en ella creamos una condiciones idóneas para acelerar el proceso natural de compostaje llevado a cabo por microorganismos (bacterias y hongos) y animales de pequeño tamaño (lombrices, cochinillas /abuelinos/bichos bola) y por el que la materia orgánica (moléculas complejas) se descompone generando sales minerales (moléculas sencillas) que serán el alimento para nuestras plantas. El producto final es el compost, una mezcla de materia orgánica a medio descomponer y minerales disponibles para las plantas. En la compostera podemos ir volcando todas las peladuras de vegetales que utilizamos para cocinar y convertirlo en fertilizante para nuestro huerto.

7. En la siguiente fotografía se observan los semilleros que usamos para germinar semillas de lo que más nos guste hasta que puedan trasplantarse al bancal, cuando hayan crecidos al menos una o dos hojas verdaderas, pues las primeras hojas que vemos al germinar son los llamados cotiledones.

8. A veces nuestras plantas necesitan una ayudita más concreta como podas, tratamientos ecológicos, aporcados, o la polinización manual de flores de calabacines para que no aborte el fruto y podamos disfrutar de él, de la tierra a la mesa. 

9) Asociación entre plantas: al igual que en la sociedad, la variedad es una virtud que aporta resiliencia y estabilidad al sistema. En AE nos apoyamos en la diversidad para crear un agroecosistema más resistente a las plagas y condiciones climáticas. Las plantas al igual que las personas tienen muchas formas de relacionarse entre ellas y no solo compiten si no que sobre todo colaboran. En AE estudiamos esas relaciones entre plantas y las aprovechamos para disponerlas en nuestro bancal optimizando al máximo la cooperación entre ellas.